La tasa de inflación de Francia aumentó en febrero hasta el 7,2%.

El organismo de estadística INSEE anunció el martes que la tasa de inflación anual de Francia subió inesperadamente al 7,2% en febrero, un ligero repunte desde el 7,0% de enero, causado principalmente por el aumento de los precios de los alimentos.

Los datos preliminares de inflación de febrero superaron las previsiones de Reuters, que apuntaban a una lectura del 7,0%. El Ministro de Hacienda, Bruno Le Maire, se ha reunido con minoristas franceses de alimentación para discutir estrategias que ayuden a los consumidores a hacer frente a la excesiva inflación de los precios de los alimentos. Le Maire ha declarado que prevé que la inflación alcance su punto álgido este verano y empiece a descender después.

Por otra parte, la inflación de los comestibles británicos alcanzó el 17,1% el 19 de febrero debido al conflicto de Ucrania.

En declaraciones a Reuters el martes, Philip Lane, economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), afirmó que aunque las presiones inflacionistas en la zona euro se han debilitado, el banco seguirá subiendo los niveles de interés hasta que pueda estar absolutamente seguro de un resurgimiento del crecimiento de los precios hasta la marca del dos por ciento.

El BCE debería subir los tipos al 3% en marzo, para acercarse al 4% en 2023. Será otra subida de 50 puntos básicos.

La inflación española podría bajar pronto

Wouter Thierie, economista de ING, prevé que la inflación española disminuya en los próximos meses debido a la bajada de los precios de la energía. Sin embargo, el descenso debería ser gradual porque las presiones subyacentes sobre los precios siguen siendo bastante fuertes. Según él, la inflación subyacente (excluidos los alimentos y la energía) sigue subiendo, y las empresas esperan precios altos.

La solidez de la economía de la eurozona también facilita a las empresas la ejecución de subidas de precios. Esto contribuye a la persistencia de la tasa de inflación subyacente. La tasa media de inflación en España será del 4,3% en 2021, y bajará al 2,7% en los próximos dos años. El banco holandés prevé que la inflación no volverá al 2% hasta la segunda mitad de 2024.

El martes, el Instituto Nacional de Estadística (INE) dio a conocer los primeros datos. Los datos revelaron que, en febrero, los precios al consumo en España retomaron su trayectoria alcista anterior, siendo un 6,1% superiores a los de la misma época del año anterior. Este incremento fue más rápido que el del 5,9% registrado en el periodo de 12 meses anterior a enero. También fue superior a las predicciones del 5,7%, realizadas por analistas entrevistados por Reuters.

La inflación española encadena así dos meses consecutivos de subidas en términos anuales, después de que el país lograra aumentar los precios en el segundo semestre de 2022, registrando la cifra más baja de la zona euro a finales de año.