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El euro se desplomó el viernes. ¿Y el dólar?

La moneda común cotizó en rojo el viernes. Los datos económicos de la zona euro fueron mixtos, lo que provocó cierta confusión en el mercado. Los inversores se preguntan cuál será el próximo movimiento del Banco Central Europeo. Inicialmente esperaban que el banco subiera los tipos de interés en su reunión de la semana que viene, pero parece que los operadores del mercado ya no están seguros de que el BCE vaya a llevar a cabo la subida.

Nuevos datos mostraron que el PIB de la eurozona creció un 0,1% en el primer trimestre de 2023. Es menos de lo que esperaban los analistas, que, según las encuestas, apostaban por un crecimiento de al menos el 0,2%. Además, en Alemania y Francia, las dos mayores economías de Europa, el crecimiento económico se ralentizó considerablemente, sobre todo después de que el consumo interno disminuyera en los últimos meses. En cambio, España e Italia registraron un crecimiento superior al previsto inicialmente.

Carsten Brzeski, Jefe Global de Macroeconomía de ING, señaló que noticias tan contradictorias dificultarían la tarea del BCE. Los datos de inflación también fueron mixtos, lo que provocó que el euro cayera un 0,4% hasta 1,0986 dólares el viernes. A pesar de la caída, la divisa aún cotizaba cerca de su máximo de un año alcanzado recientemente.

En abril, el euro subió casi un 1,3%, sobre todo gracias a las expectativas de que el Banco Central Europeo siguiera subiendo los tipos de interés. El viernes, el Fondo Monetario Internacional aconsejó al banco central que siguiera endureciendo su política monetaria al menos hasta mediados de 2024.

El euro también repuntó frente al yen japonés. Alcanzó brevemente su nivel más alto desde diciembre de 2014, cambiándose a 149,50 yenes. Sin embargo, la divisa cotizó un 1,2% a 149,42 yenes por última vez. El Banco de Japón mantuvo su política monetaria ultralaxa, para frustración de los operadores.

¿Cuál es la situación actual del yen?

La divisa japonesa se desplomó frente al dólar estadounidense, alcanzando su nivel más bajo desde el 10 de marzo. El viernes se desplomó un 1,55%, hasta 136,11 USD. El Banco de Japón anunció que mantendría su política monetaria moderada en su primera reunión con Kazuo Ueda como gobernador. Aun así, el banco también prometió que revisaría su política monetaria en breve.

Mientras tanto, el billete verde avanzó apoyado por los nuevos datos que mostraron que la inflación sigue siendo alta en Estados Unidos. Los inversores esperan que la Fed vuelva a subir los tipos. En consecuencia, el índice del dólar se disparó un 0,59%, hasta 102,02 el viernes. Se disparó a un máximo de una semana, recuperando las pérdidas sufridas el miércoles, cuando cayó a un máximo de casi dos semanas.

El viernes, el rublo ruso subió en las primeras operaciones. Los operadores están a la espera de la decisión del banco central ruso. El rublo se cambiaba a 81,1275 frente al dólar, por encima de los 81,3325 alcanzados el jueves.



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