Resumen del gráfico del 09 de agosto para EURUSD y GBPUSD
Análisis del gráfico de EURUSD
Durante la sesión asiática, el euro encontró apoyo en el nivel de 1,02000, seguido de un impulso alcista que llevó al par hasta el nivel de 1,02500. Por el momento, se está consolidando en torno a ese nivel. El euro cotiza a 1,02300, lo que representa un avance del 0,38% frente al dólar. Necesitamos una consolidación positiva por encima del nivel de 1,02500 para continuar con la opción alcista. Después de eso, el euro tendría la oportunidad de continuar hacia la zona de resistencia de 1,03000. Para una opción bajista, necesitamos una consolidación negativa desde este nivel. Entonces veríamos un retroceso hasta la zona de soporte de 1,02000 esta mañana. Si se rompe el EURUSD por debajo de esa zona, el par se cruza por debajo de las medias móviles, lo que podría reforzar aún más la presión bajista. Los objetivos potenciales más bajos son los niveles 1,01500 y 1,01000.
Análisis del gráfico de la GBPUSD
El par GBPUSD tuvo un movimiento positivo esta mañana durante la sesión asiática. La libra ha pasado de la consolidación en torno al nivel de 1,20800, y ahora está por encima del nivel de 1,21000. El máximo de hoy estaba en el nivel de 1,21300, y ahora hay una nueva consolidación superior por encima de 1,21000 si la libra logra estabilizarse. La MA20 y la MA50 están en el lado alcista, mientras que la media móvil MA200 está en la zona de 1,21500. Para continuar con la opción alcista, necesitamos una continuación de la consolidación positiva y un movimiento por encima del nivel de 1,21500. Después, deberíamos intentar subir hasta el nivel de 1,22000. Necesitamos una consolidación negativa y un retroceso por debajo del nivel de 1,21000 para una opción bajista. Si eso ocurriera y vemos que la libra cae por debajo de este nivel, se nos abriría un espacio hacia la zona de soporte inferior de 1,20000.
Panorama del mercado
El vicegobernador del Banco de Inglaterra, Dave Ramsden, dijo que probablemente el banco tendrá que subir los tipos de interés más de lo previsto para hacer frente a las presiones inflacionistas. La semana pasada, el banco central aumentó los tipos en un 0,50%, pero los funcionarios del banco siguen advirtiendo de una recesión inminente que podría durar hasta 2024.
Teniendo en cuenta los factores técnicos y la perspectiva de posibles estímulos fiscales en otoño, es probable que la profundidad de la recesión sea mucho menor de lo que sugiere el escenario principal del BoE, dijo el economista de Mizuho Colin Asher, añadiendo que las perspectivas no son buenas. El viernes se publicarán los datos del PIB, que nos darán una idea del estado de la economía británica.
