Pfizer donará ganancias rusas a Ucrania

Mientras cada vez más empresas introducen sanciones contra Rusia, algunas, como los proveedores de medicamentos de primera necesidad se enfrentan a un dilema moral. Mientras que castigar al gobierno ruso por su agresión es justificable, ¿qué pasa con la toma de medicamentos de la gente? Después de todo, COVID sigue existiendo y afectando a muchas personas, y no se puede empujar a un país a sus días de medicina premoderna. Sin embargo, Pfizer ha encontrado una solución que deja intacto el suministro de medicamentos y castiga el comportamiento invasivo. En concreto, el gigante de la medicina decidió que seguiría operando en Rusia, pero desviando todos sus beneficios.

Naturalmente, el camino que tomarán las ganancias es hacia el país vecino, Ucrania. Todo el dinero de la filial rusa de Pfizer se destinará a los esfuerzos de ayuda en Ucrania. Pfizer lo donará como ayuda humanitaria directa para los afectados por el conflicto. El movimiento de la compañía abre las puertas a sus pares para que hagan movimientos similares, sancionando al gobierno ruso y al mismo tiempo ayudando al pueblo.

Sin embargo, Pfizer incluso llevó su postura un paso más allá de la simple reorientación de sus beneficios. En concreto, ha decidido suspender los planes de cualquier empresa futura en Rusia. Esto significa que la empresa detendrá todas las inversiones en el campo medicinal, impidiendo que el dinero fluya hacia el país.

Además, también ha decidido detener todos los ensayos clínicos que se están llevando a cabo en Rusia. Finalmente, pondrá fin a la cooperación con los pacientes en los ensayos clínicos actuales y dejará de reclutar nuevos.

Y como última medida, Pfizer también pondrá fin a la cooperación con cualquier proveedor con sede en Rusia. Esto significa que el único beneficio que Rusia seguirá obteniendo de Pfizer es el impuesto que la empresa paga.

Pfizer ha encontrado una solución que parece ideal para la situación actual. Evita la crisis moral de despojar a la gente de su medicación mientras sigue perjudicando económicamente a Rusia.

La cuarta dósis es necesaria

En otras noticias relacionadas con Pfizer, su director general anunció que sería necesaria otra vacuna de refuerzo en el futuro. Esto no es una sorpresa para muchos, ya que las nuevas variantes han evolucionado constantemente desde la tercera vacuna. Las medidas actuales hacen un trabajo sólido en la prevención de hospitalizaciones y muertes, pero carecen de consistencia. Las vacunas hacen poco para prevenir la infección contra la variante Omicron, dejando así espacio para que el virus se propague.

Pfizer planea fabricar una vacuna a prueba del futuro que permita manejar las futuras variantes de COVID mejor que las actuales. Algunas personas que se encuentran en grupos de peligro extremo ya han recibido la cuarta vacuna. Naturalmente, el contenido de esa vacuna es el mismo que el de la tercera, y sirve como refuerzo de anticuerpos.

Aun así, la vacuna, aunque se apruebe, sólo se aplicará inicialmente a la población adulta. La aprobación de la FDA para el uso de la vacuna en adolescentes sanos puede estancarse si es que es aprobada en primer lugar. Pfizer dijo que presentó los datos a la institución y que verá lo que depara el futuro.

En cuanto a los niños, los que tienen entre 5 y 11 años pueden recibir actualmente dos dosis pediátricas de la vacuna. Los menores de cinco años aún no pueden vacunarse, pero eso podría cambiar pronto. Pfizer ha desarrollado una vacuna de tres dosis de tamaño infantil para bebés y niños pequeños de entre seis meses y cinco años. Si se aprueba, la vacunación podría comenzar ya en mayo.