El dólar terminó hoy en rojo más profundo. ¿Qué pasa con el australiano?

El dólar estadounidense cayó por tercer día consecutivo el martes. La divisa retrocedió desde sus máximos de dos décadas frente a una cesta de seis divisas principales, ya que el aumento del apetito de los operadores por las apuestas más arriesgadas redujo el atractivo del billete verde como refugio.

Los resultados positivos de United Airlines y Home Depot también contribuyeron a elevar el sentimiento de riesgo, junto con el optimismo en torno a la relajación de las restricciones de China para contener el coronavirus. El martes, el índice del dólar cayó un 0.7% hasta 103.39, alcanzando su nivel más bajo desde el 6 de mayo. La semana pasada, el índice se disparó hasta alcanzar un máximo de dos décadas, impulsado por una Reserva Federal de línea dura y la preocupación por la inminente crisis económica mundial provocada por el conflicto entre Rusia y Ucrania.

Brad Bechtel, director mundial de divisas de Jefferies, declaró que el estado de ánimo en los mercados de divisas había mejorado drásticamente desde la semana pasada. La mayoría de las clases de activos están rebotando y recuperando los movimientos de la semana pasada. Según Bechtel, el resultado es un repunte en la renta variable, así como una venta en la renta fija, con casi todas las divisas del mundo subiendo frente al dólar estadounidense.

El billete verde se mantuvo en niveles bajos después de que los datos mostraran que las ventas al por menor en Estados Unidos se dispararon en abril. La gente compró vehículos de motor en medio de una mejora de la oferta. También frecuentaron restaurantes, sin mostrar signos de que la demanda disminuya a pesar del aumento de la inflación. Más tarde, el martes, los inversores seguirán de cerca a los oradores de la Fed, incluido el presidente Jerome Powell, en busca de cualquier indicio sobre si las expectativas de tipos a corto plazo podrían ser aún más agresivas.

¿Cómo cotiza el euro?

El euro subió un 1.05%, hasta 1.0541 dólares. El euro amplió su rebote desde el mínimo de cinco años alcanzado la semana pasada. La moneda común se benefició de las declaraciones del lunes del responsable de la política monetaria del BCE, François Villeroy de Galhau. Anunció que un euro débil podría amenazar la estabilidad de los precios en el bloque monetario. El euro también ganó terreno después de que el jefe del banco central holandés, Klaas Knot, realizara algunos comentarios de línea dura.

Knot señaló que el Banco Central Europeo no sólo iba a aumentar los tipos en 25 puntos básicos en julio, sino que también estaba dispuesto a considerar una subida mayor si la inflación se disparaba más de lo previsto. Al mismo tiempo, Shaun Osborne, estratega jefe de divisas de Scotia Bank, cree que la venta de la moneda única está empezando a parecer estirada.

La libra esterlina aprovechó el debilitamiento del dólar para subir un 1.29%. La libra alcanzó su nivel más alto desde el 5 de mayo, después de que los sólidos datos del mercado laboral reforzaran las expectativas de los inversores. Estos últimos creen que el Banco de Inglaterra seguirá subiendo las tasas para frenar la creciente inflación.

El dólar australiano también avanzó un 0.73%. El banco central del país se planteó una subida más pronunciada de las tasas de interés en su reunión de mayo. Las actas publicadas el martes dejaron entrever que el banco podría volver a subir las tasas en junio.

Por su parte, el yuan chino offshore sumó un 0.8% el martes. Anteriormente, había experimentado una fuerte caída, perdiendo cerca de un 7% desde mediados de abril. Sin embargo, Shanghái registró el martes tres días consecutivos sin nuevos casos de coronavirus fuera de las zonas de cuarentena. Otras ciudades también han señalado el inicio del levantamiento de las restricciones.

 

Las divisas de los mercados emergentes también subieron. ¿Cuáles ganaron más?

La mayoría de las divisas y acciones asiáticas cotizaron en verde el martes, impulsadas por el optimismo ante la mejora de la situación de China en el COVID-19. El debilitamiento del billete verde y la caída de los rendimientos del Tesoro estadounidense durante la noche también reforzaron el ánimo de los inversores.

El martes, las acciones de Filipinas e Indonesia ganaron más de un 1% cada una. El won de Corea del Sur lideró las ganancias entre las monedas de los mercados emergentes. Además, las acciones de Tailandia se dispararon un 1.6%, mientras que el baht saltó casi un 0.6%. La segunda economía del sudeste asiático registró un crecimiento del 2.2% en el trimestre de marzo, superando la previsión de los analistas de un aumento del 2.1%.

Otros mercados bursátiles emergentes de Asia también subieron, tras una mejora del frágil apetito de riesgo mundial. Los analistas del OCBC Bank señalaron que la economía china se debilitó considerablemente en abril debido a los cierres por coronavirus en algunas partes. Como resultado, tanto la producción industrial como las ventas minoristas fueron más débiles de lo esperado. Sin embargo, China ha intensificado sus políticas de apoyo en la semana anterior.

La rupia indonesia, que ha caído casi un 1.6% desde que se interrumpieron los envíos de aceite de palma crudo el 29 de abril, se desprendió otro 0.2%. Alcanzó su nivel más bajo desde el 2 de noviembre de 2020. Por otro lado, el superávit comercial del país se disparó hasta alcanzar el mayor de su historia, con 7,560 millones de dólares en abril.