Servicio de Supervisión Financiera (SFS)

 

El Servicio de Supervisión Financiera de Corea del Sur desempeña un papel importante a la hora de garantizar que los procesos financieros del país sean justos. Es una entidad global que se encarga de la mayoría de los negocios relacionados con las finanzas. Como tal, abarca la banca, el mercado de valores, diversas formas de contabilidad y la protección de los clientes de servicios financieros. Con su amplia influencia, se podría suponer que existe desde hace bastante tiempo, pero la verdad es que es un organismo relativamente nuevo.

 

Antes de la fundación del Servicio de Supervisión Financiera, la regulación financiera de Corea del Sur estaba muy dispersa. Cada rama financiera importante estaba bajo la vigilancia de una entidad diferente, lo que creaba una situación algo caótica. Además, la autoridad de supervisión estaba dividida en tres partes, entre dos entidades de gobierno y el antiguo Ministerio de Finanzas y Economía (ahora Ministerio de Estrategia y Finanzas). Así, el Banco de Corea solía supervisar la banca, y el Consejo de Supervisión de Valores, y el ministerio, los valores. Es fácil darse cuenta de cómo eso creaba problemas de coherencia en las resoluciones y era un obstáculo administrativo general.

 

En los años 80, una serie de cambios en el ámbito financiero hizo que la cuestión quedara aún más expuesta. Las operaciones financieras complejas podían corresponder a distintos organismos reguladores en determinadas situaciones. En otras, no se sabía qué organismo debía regular un proceso financiero en absoluto. Y aunque los problemas eran cada vez más evidentes, pasó bastante tiempo hasta que se unificó la supervisión.

 

El Comité Presidencial para la Reforma Financiera de 1997 tenía tres sugerencias principales. La unificación de la supervisión, el establecimiento de una autoridad autónoma y la distribución adecuada de responsabilidades condujeron a la fundación del SFS. Aún así, la administración tardó en empezar a funcionar, y finalmente lo hizo en 1999.

Fundación e Impacto del SFS

Inicialmente, el Servicio de Supervisión Financiera tenía el propósito de hacer crecer la economía de la nación. Debía promover el avance de la industria financiera, así como la estabilidad de diversos mercados financieros. Además, tenía la función de preservar la equidad en forma de protección de los clientes y el establecimiento de órdenes de crédito y prácticas de transacción. Para llevar a cabo estas tareas, la Ley de Creación dotó al SLF de un estatuto jurídico específico. En concreto, las operaciones de la entidad están totalmente separadas de los gobiernos central y regional de Corea.

 

Así que la agencia tiene bastante autonomía, lo que permite una mayor equidad a la hora de tomar decisiones. El hecho de que los gobiernos no la inhiban también reduce las posibilidades de corrupción y favoritismo.

 

Mirando hacia atrás, la fundación del SFS tuvo un impacto enormemente positivo en la economía de Corea del Sur. Eso es especialmente evidente cuando se observa la rapidez con la que ayudó a resolver la crisis económica que afectó a varios países asiáticos en 1997. La organización eliminó rápidamente las instituciones financieras insolventes, lo que hizo que todo el sistema se estabilizara. En el periodo 1998-2003, la actividad de la autoridad hizo que se cerrara un número importante de empresas defectuosas (840), incluidos algunos bancos (14).

 

Sin embargo, el SFS no sólo cierra empresas cuando no se adhieren a la regulación financiera. Durante esa misma crisis económica, ayudó a los conglomerados a mejorar su estructura financiera. El SFS también ayudó en futuros esfuerzos contra las prácticas empresariales perjudiciales, como la crisis de las tarjetas de crédito.

 

En general, la organización ha sido bastante activa desde el día de su fundación. El SFS es uno de los proyectos financieros más exitosos de Corea del Sur, que ha conseguido reparar un sistema fragmentado. No es exagerado afirmar que la autoridad desempeñó un papel importante en los acontecimientos que condujeron al actual bienestar económico del país.

Estructura Organizativa y Gestión

Ahora que hemos repasado el pasado y las principales funciones del SFS, es el momento de analizar su estado actual. Su sede actual está en Seúl, la capital del país y una de las mayores economías metropolitanas del mundo. La base de operaciones consta de 13 oficinas y 38 departamentos. El SFS también gestiona una multitud de oficinas regionales, así como de representación.

 

Lo más interesante es que la organización también se extiende por todo el mundo, con presencia en Nueva York, Londres, Tokio y Pekín. Su personal también reside en otras ciudades importantes, como Washington D.C. y Frankfurt.

 

En cuanto a la dirección, la organización está en manos muy capaces. Kwon Hyouk-Se está al frente de la organización como gobernador, con 30 años de experiencia en el campo financiero a sus espaldas. Por debajo de él están Park Soo Won como auditor jefe, Choi Soo Hyun como vicegobernador primero y Ho Joong Kim como contable jefe.